
Es algo indispensable en un líder. Al
tenerla, ese líder logra que sus opiniones, planteamientos y órdenes sean
aceptados, no sólo por sus distintos equipos de trabajo, sino por la mayoría de
la comunidad. Es entonces cuando su simple presencia es generadora de un gran
respeto en sus colaboradores. Un líder con autoridad moral muestra, aun en las
situaciones mas difíciles, una gran serenidad. Pero, sobre todo, un auténtico
líder es coherente entre lo que pregona y lo que practica. Es la mas importante
de las cualidades que debe tener un líder, o el presidente de un país, y es lo
que le da fortaleza a su autoridad, no la que cree obtener mediante decretos,
imposiciones y castigos.